Mediante una innovadora tecnología digital, los collares Pavlov reaccionan más rápido que los de tipo analógico, lo que significa que el estímulo de interrupción se aplica con más eficacia.
Llevan un micrófono MEMS de alta tecnología que escucha los ladridos sin captar otros ruidos, como golpes en puertas. Para los perros que ladran persistentemente, esta tecnología digital inteligente aumenta y cambia la frecuencia de interrupción en respuesta a la interrupción continua.
Además, como la batería dura de 3 a 6 meses, los Pavlov ofrecen una ventaja significativa comparados con muchos otros diseños de collares.